CRISIS DE IDENTIDAD

Crisis de identidad es la historia del tipo que se pierde entre tanto ¡blah!, entre tanto bullicio, entre tantos "no".

Crisis de identidad es esa que se enfrasca en mantener una reputación, esa que es terca y no le importa romperse ella por no romper su palabra, por no aceptar la derrota que hace ya tiempo fue y es día a día.

Crisis de identidad es ese que todos los días se autoconvence ante un espejo que hace lo que ama, mientras añora lo que intenta olvidar y cada día queda mas lejos del presente.

...es palpar con las manos astilladas, los sueños de una vida y no percatarse que la melancolía que le traen son rezagos de decisiones propias.

Deja ya de culparte, deja ya de culpar a otros por lo que no fue. Sin embargo, no garantizo que se vaya del todo. No del todo porque... ¿quiénes seríamos sin el asunto de cuestionar? Es posible perdonarte, pero insulso no cuestionarte. 

Crisis de identidad es creer que se sabe quién es uno, y empujar en esa dirección a toda costa y con todas las fuerzas. Sin saber que ese esmero es en vano. La verdad es que sabemos quién queremos ser ante los ojos de los demás, pero siempre, siempre, siempre perdemos al que somos en el camino.

Crisis de identidad puede ser tantas cosas a la vez, que a veces crees que no es nada. Lo que realmente nos llegamos a dar cuenta es de cómo se siente...¡sé que lo sabes!

Se siente como un no poder surgir, como un no poder salir de allí. Como un vacío entre pecho y espalda, como un nudo en la garganta, no muy apretado, mas bien corredizo y con sabor a cobre, que por momentos hace pequeños ruidos metálicos. 

Se siente como la tensión de tu cerebro contra las paredes traseras del cráneo, una relajación absoluta de los músculos del rostro que casi se te cae la cara. No quieres ver a nadie y duramente socializas. Pides correr, huir, pero solo logras andar en círculos internamente...por fuera: sigues sentado allí.

Hay días de pequeña y falsa esperanza, que el compañero te sonríe, que el conductor del transporte público va rápido y te hace llegar a tiempo a tu destino. Que se te cruza una moneda mordida en el camino. Que un ingreso inesperado te bendice o lo que hiciste para el almuerzo te sabe a manjar celestial.

Pero llegas a casa después de todo, y regresa...

No tienes como escapar nunca más, porque...

Crisis de identidad es...cuando te rodeas de personas que todo el tiempo te dicen lo que estás haciendo mal. Personas que hoy no están más, pero que siguen viviendo en tu cabeza. Que por mas amor propio que te fumes a diario, solo estarás embriagándolas parcial y temporalmente.

Crisis de identidad es el amor ciego al autoflagelo con látigos de palabras y gestos que los demás han puesto en ti. Con métodos que son los planes que tu emprendiste, sin darte cuenta que eran impuestos y mandados a hacer.

Es levantarte un día cualquiera y no saber quien te está mirando a los ojos frente al espejo, teniendo la extraña sensación de haber visto esa persona en alguna parte.

Crisis de identidad...es la decepción de haberte convertido en padre de un fantasma al que le cuelgan harapos de los sueños que un día un niño ingenuo soñó.

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